miércoles, mayo 09, 2012

Again!


Un buen tiempo desaparecido de este mundo de desahogos y ahogos, de consuelos y risas, de metáforas y letras. Hoy regreso como siempre al mismo lugar, a la misma esquina a confesarme con mis santos y demonios, para hacer un acto de contricción universal para exculpar a mi necesidad de escribir. A lo largo de las historias de “dateduro” me he sentido crecer. Antes sólo escribía para reirme de mis calamidades, luego con el tiempo fui aprendiendo que las ironías de la vida también traen muchas lecciones que no he querido dejar pasar, y ahora no es que sea tan serio con este asunto, pero la vida, esa misma que nos une y nos separa me ha concedido quizás un tono más reflexivo ante este mundo cada vez más aturdido por los gritos de pocos y el silencio de muchos.